Olivier Rousteing, con más de una década al frente de Balmain, continúa redefiniendo el ADN de la casa parisina con su colección Resort 2026 para hombre. Esta propuesta, lejos de los gritos y la ostentación, se enfoca en un "lujo relajado", invitando a construir un armario que acompaña al hombre moderno con una elegancia que se insinúa y conquista, sin necesidad de validación externa.
"Balmain es una actitud", resuena la nueva consigna de la marca, y esta colección Resort 2026 es el claro ejemplo. Rousteing busca la permanencia sobre la viralidad, ofreciendo prendas que trascienden las tendencias efímeras para convertirse en básicos con carácter. La inspiración en los archivos de Pierre Balmain, particularmente el estilo de los años 60, se reinterpreta con un enfoque contemporáneo, priorizando la practicidad y versatilidad.
Una de las transiciones más notables en esta colección es el sutil alejamiento de las siluetas ajustadas que Rousteing ayudó a popularizar. En su lugar, se abrazan formas más arquitectónicas y liberadas. La sastrería se reinventa en clave resort, con piezas oversized, a menudo en lana y con tradicionales estampados de Príncipe de Gales, que se combinan con micro-shorts o faldas (en la colección femenina, pero la influencia es palpable). Esta mezcla crea siluetas asimétricas y en capas que se sienten a la vez precisas y con un movimiento natural.
Los estampados juegan un papel crucial, reinterpretando volúmenes y construcciones clásicas con un lenguaje moderno. Abrigos con estampados estilo Monet y las referencias florales, tan queridas por el couturier, florecen en las telas como lienzos pintados, oscilando entre la abstracción y el impresionismo. Los accesorios, cada vez más esenciales en la propuesta de Balmain, amplían su repertorio. Bolsos como el Anthem, Sync, Ébène y Shuffle se visten de tweed, florales de archivo y hebillas esculturales, diseñados no solo para complementar, sino para definir el look.
Imágenes | Cortesía