Antony Morato se inspira en la ciudad alemana de Stuttgart con una colección que fusiona el poder de la sastrería con la energía streetwear. Entre tonos burdeos, negros, grises y blancos, la propuesta refleja la dualidad de una ciudad donde tradición y modernidad conviven en armonía.
Stuttgart es conocida por su legado cultural y su espíritu innovador. Sus castillos y plazas cargados de historia conviven con la vanguardia de los museos de Porche y Mercedes-Benz, un contraste que se traslada a esta colección: trajes clásicos en tonos burgundy, chaquetas de piel sofisticadas y prendas técnicas dinámicas y funcionales.
El resultado es un armario versátil, pensado para un hombre cosmopolita que se mueve entre la vida profesional y el ocio.